El porcelanato es un material que se ha vuelto muy popular para pisos y recubrimientos, tanto en interiores como en exteriores. ¿Qué hace que el porcelanato sea tan atractivo y ventajoso? A continuación te presentamos algunos de sus beneficios más destacados.

El porcelanato es muy resistente a los golpes, los impactos, los cambios de temperatura y la humedad. Esto lo hace ideal para zonas de alto tránsito, como aeropuertos, hospitales o comercios, así como para zonas expuestas al sol o la lluvia, como terrazas o fachadas. Además, el porcelanato permite instalar calefacción radiante debajo del pavimento, aprovechando su capacidad de absorber y retener el calor.

El porcelanato es muy versátil y estético. Se puede encontrar en una gran variedad de formatos, texturas, colores y acabados, que se adaptan a todo tipo de ambientes y estilos decorativos. El porcelanato puede imitar la apariencia de otros materiales más costosos o delicados, como el mármol o la madera, pero con mayor durabilidad y facilidad de limpieza. El porcelanato también ofrece la posibilidad de crear diseños personalizados y originales con piezas de diferentes tamaños y formas.

El porcelanato tiene un bajo mantenimiento y un buen precio. Al ser un material poco poroso y resistente a las manchas, solo se necesita agua para mantenerlo limpio y brillante. No se requieren productos abrasivos ni tratamientos especiales que puedan dañarlo o rayarlo. El porcelanato también tiene una buena relación calidad-precio, ya que ofrece una larga vida útil y un aspecto lujoso sin tener que gastar demasiado.